jueves, 10 de enero de 2008

jueves, 3 de enero de 2008

martes, 1 de enero de 2008

Dibujos de chinchillas





Cuidados de las chinchillas





JAULA





La jaula de nuestra chinchilla debe de ser lo mas espaciosa que nos podamos permitir, no sin olvidar que son necesarias unas dimensiones mínimas para que nuestra chinchilla viva a gusto y no sufra de estrés, estas dimensiones mínimas corresponden a las de una jaula con dos alturas y que mida unos 70 centímetros de largo, 40 de alto y 40 de ancho para alojar a una sola chinchilla. En el caso de querer alojar a dos chinchillas necesitaremos una jaula con un mínimo de tres alturas y unas dimensiones de 70 X 40 X 70 aproximadamente.


El material con que debe estar hecha la jaula debe ser resistente a sus mordiscos, lo ideal es que sean barrotes metálicos ya que la madera la roerá hasta destrozar la jaula. Los plásticos y las pinturas de revestimiento deben de ser no tóxicos. Si las baldas de los distintos pisos de la jaula son de madera deberán llevar los bordes cubiertos de chapa metálica para evitar que los roan, lo ideal es que sean de un material que la chinchilla no pueda morder.


Los barrotes de la jaula deben tener preferentemente disposición horizontal y la separación óptima entre ellos es de dos centímetros para evitar que la chinchilla se dañe cuando saque el hocico entre los barrotes.
El substrato absorbente que debemos colocar en el suelo de la jaula deberá consistir en virutas de madera, substrato higiénico natural de maíz o cilindros de viruta prensada, ya que los tres son un material limpio, muy absorbente, difícil de colonizar por bacterias y económico. Nunca deberemos emplear como sustrato arena o piedras para gatos, ya que levanta un polvo que al ser respirado por nuestra chinchilla puede causarle infecciones y problemas respiratorios. Tampoco usaremos papel de periódico ya que, aunque el papel no es tóxico, la tinta de las letras si lo es y si lo ingiera podría sufrir una intoxicación.


El comedero debe ser pesado, de barro puede venir bien, para que no lo pueda volcar.


El bebedero debe de ser como los de hamster, pero con el tamaño adecuado a nuestra mascota. Además el agua debe ser de mineralización muy débil y no se debe hacer cambios muy bruscos en la marca del agua.


En la jaula se debe colocar un pequeño refugio para que el animal pueda meterse y sentirse seguro como si de una madriguera se tratara. Una chinchilla que no dispusiera de un refugio se estresaría y tendría una posibilidad mayor de contraer enfermedades.


La jaula debe estar alojada en un sitio tranquilo de la casa y fuera de corrientes de aire y fresco.












ALIMENTACIÓN







El animal debe tener siempre en su jaula heno para poder comer cuanto quiera, esto es muy importante ya que su estómago no debe vaciarse nunca, necesitan estar continuamente comiendo para mantener su salud.



El heno y la alfalfa le ayudan a digerir la comida evitando el estreñimiento y las diarreas. El heno, le aportara la fibra necesaria, ya que se compone principalmente de celulosa. El aparato digestivo de las chinchillas está preparado a la perfección para digerir celulosa, la cual es la principal fuente de nutrición del animal en su medio natural. Por tanto, es la celulosa, suministrada en forma de heno, la que regula el correcto funcionamiento de su sistema digestivo, ayudando a la reabsorción de agua en el intestino y manteniendo una composición de la flora bacteriana correcta. Al contrario que en humanos (a los cuales nos puede provocar diarreas), la fibra (celulosa) es muy importante para prevenir y tratar las heces blandas. Es necesario suministrar diariamente heno a nuestra chinchilla para regular su organismo. Si nuestra chinchilla por alguna causa sufriera trastornos digestivos como diarreas, heces blandas o estreñimiento, deberemos dejar solamente heno en su dieta para ayudarla a equilibrarse. Aunque una diarrea es tan solo un síntoma de algo mas importante, con lo cual, deberemos siempre llevarla al veterinario, de igual modo que si las heces blandas o el estreñimiento continúan tras unos días a base de heno.



La alfalfa le aporta a la chinchilla la cantidad de proteínas necesarias para su correcto desarrollo, ya que el resto de alimento que la chinchilla ingiere como animal herbívoro que es, es muy pobre en proteínas, pero no debemos abusar de ella, ya que contiene mucho calcio, que administrado en exceso a nuestro animal puede provocarle la aparición de piedras en la vejiga.



En caso de no proporcionarle a nuestra chinchilla una dieta con gran cantidad de fibra destruiremos poco a poco su flora bacteriana, la cual está especializada en digerir la celulosa y, ésta será sustituida por unas bacterias digestivas especializadas en digerir los hidratos de carbono, bacterias algunas que pueden resultar patógenas para nuestras chinchillas y que producen gases que serán muy molestos para nuestro animal.
Existen numerosos tipos de heno, más o menos frescos, con aromas, con trocitos de manzana o zanahoria, con diente de león... Lsa alfalfa se puede encontrar fresca, seca, compacta en taquitos o incluso comercializada en forma de anillos que a las chinchillas les encantan.



Hace unos años las chinchillas eran unas mascotas prácticamente desconocidas en España con lo cual no existían piensos específicos para ellas y las pocas personas que tenían una chinchilla las tenían que alimentar con piensos para conejo, los cuales les provocan diarreas y trastornos digestivos, afortunadamente las cosas hoy en día han cambiado y podemos encontrar en las tiendas de animales pienso para chinchillas de diferentes marcas, entre ellas Vitakraft, Novopet y Tyrol. Estos piensos tienen los requerimientos nutricionales que la chinchilla necesita y por tanto es lo mejor que podemos darle a nuestra mascota. Pero tampoco conviene abusar de ellos, nunca debemos olvidar que el principal componente de la dieta de nuestra chinchilla debe ser el heno.



Si al comprar la chinchilla en la tienda no disponen de comida especial para chinchillas y nos dicen que la han estado alimentando con comida para conejos deberemos pedir que nos encarguen la comida especifica de chinchillas y mientras tanto seguir con la misma que le daban en la tienda, una vez tengamos la comida de chinchillas deberemos añadírsela a la dieta paulatinamente, mezclando la comida de conejos con la de chinchillas y día a día ir aumentando la proporción de comida de chinchilla y disminuyendo la de conejo hasta finalmente darle solo comida de chinchillas.



Debemos hacer esto porque las chinchillas son especialmente sensibles a los cambios de dieta y si de un día para otro cambiamos bruscamente su dieta podemos provocarle una diarrea, graves trastornos digestivos y en algunas ocasiones incluso la muerte.



El agua debe ser limpia y fresca, sobretodo en verano se le debe de renovar todos los días. Es muy conveniente que el agua sea mineral ya que el agua del grifo contiene grandes cantidades de cloro que pueden ser perjudiciales para su delicado estómago.
El agua se le proporcionara en un recipiente tipo botella con chupete metálico de tamaño acorde con nuestra mascota (más grandes que los de hámster). El chupete debe quedar a una altura cómoda para el animal, de manera que pueda beber estando en postura erguida pero sin tener que hacer grandes esfuerzos por llegar a la boquilla.







BAÑOS DE ARENA



Para que nuestra chinchilla esté sana necesita que se le proporcione una arena especial para ellas, llamada marmolina, en la cual se revolcaran, restregando su denso y suave pelaje contra esta arena. NUNCA se debe mojar a una chinchilla.



Este baño es necesario porque las chinchillas necesitan impregnarse con esta arena para eliminar el exceso de humedad de su pelaje y que este luzca sano y brillante, evitando así el peligro de que enferme por hongos. Por lo cual es muy importante proporcionarle estos baños de arena a nuestro animal y es algo que no deberemos descuidar nunca.
Debemos verter 2 dedos de marmolina en un recipiente lo bastante grande como para que la chinchilla pueda caber dentro y revolcarse sin problemas y lo bastante alto como para permitir que entre sin problemas y que con sus juegos tire fuera el mínimo de arena posible.
Podemos aprovechar los paseos para ponerle el recipiente y que se bañe o introducírselo dentro de la jaula.
Con 15 minutos que tenga a su disposición la marmolina es suficiente, ya que de lo contrario en lugar de revolcarse en ella la utilizara de WC ensuciándola de forma innecesaria.



Tras estos 15 minutos limpiaremos la arena, retirando los pelos, pipis y cacas que puedan haber y guardaremos el recipiente con la arena para la próxima vez.
Cuando quede poca arena en el recipiente podemos volverlo a llenar hasta los 2 dedos si la marmolina esta limpia, pero si esta sucia deberemos tirar la que quede y renovarla toda.



La frecuencia adecuada de los baños depende del animal y de la humedad ambiente del lugar donde vive la chinchilla. Una buena pauta a seguir para los primeros baños es hacerlos día si día no y observar a la chinchilla.

Si vemos que su pelaje esta apelmazado y húmedo los baños deberán hacerse a diario, pero si vemos que se rasca mucho y que la piel esta reseca deberemos reducirlos a solo uno o dos baños semanales. Si vivimos en una ciudad costera y de clima caluroso en verano los baños deberán hacerse a diario, excepto si observamos que esto reseca demasiado el pelo de nuestra chinchilla, que entonces deberán realizarse en días alternos.

De todos modos no debemos olvidar que esto son solo unas pautas y no reglas fijas, ya que depende mucho del animal. Lo importante es observarla y de este modo averiguar que es lo mejor para nuestra chinchilla. Nunca debemos olvidar que tanto la falta como el exceso de baños de arena puede provocar algunas patologías en nuestro animal: Si dejamos pasar demasiado tiempo entre un baño y otro el pelaje de nuestra chinchilla tendrá exceso de humedad y por tanto será más fácil que sufra un ataque por hongos. Por el contrario, si nos excedemos en la frecuencia de baños de arena o se la dejamos a libre disposición en la jaula aumentamos la posibilidad de otitis, faringitis, infección de oídos, estomatitis, obstrucciones u otros problemas digestivos, descamaciones por sequedad en las orejas y las patitas, etc...



En conclusión, los baños son completamente necesarios para nuestro animal, pero no debemos caer en el error de que cuanto mas lo bañemos mejor y mas bonito tendrá su pelo, porque podemos hacerle más mal que bien. Baños de arena en su justa medida.
MANEJO
En el momento en que nuestra chinchilla llega a casa debemos comprender que se muestre asustada o esquiva e intentaremos estresarla lo menos posible. Elegiremos para ella un lugar de la casa tranquilo, sin ruidos y que no sea lugar de paso frecuente de los miembros de la familia, también evitaremos el contacto con otras mascotas de casa. Durante estos primeros días no cogeremos, manosearemos ni agobiaremos a nuestro animal.

En nuestros primeros contactos con la chinchilla recién llegada a casa deberemos acercarnos a la jaula y dejar que nos vea, que se acostumbre a nuestra presencia mientras le hablamos con un tono suave y pausado para que el animal se acostumbre a nuestra presencia. Cuando no muestre temor ante nuestra presencia podemos empezar a meter la mano en su jaula dejando siempre que sea ella la que se acerque a olernos, sin perseguirla ni agobiarla, poco a poco la curiosidad irá venciendo a su temor y se acercará a olisquear ese elemento nuevo que ha aparecido en su jaula. Podemos ofrecerle alguna golosina para que nuestra chinchilla nos asocie con algo bueno y nos pierda el temor mas rápidamente, pero nunca deberemos abusar de las chucherías porque podría ser dañino para su salud. Es muy normal que durante estos primeros días la chinchilla mordisquee nuestros dedos con quizás demasiada fuerza haciéndonos incluso algo de daño, pero no lo hacen con mala intención, tan solo examinan nuestros dedos para comprobar si son susceptibles de ser roídos, pronto aprenderá que no lo son.

Una vez la chinchilla sepa que nuestra mano no le va a hacer daño es el momento de empezar a cogerla, para lo cual deberemos abrir por completo nuestra mano dentro de la jaula de la chinchilla y dejar que sea ella la que se suba, a lo sumo podemos introducir la mano por debajo de la chinchilla pero nunca sujetarla con firmeza, solo conseguiríamos asustarla. Con la chinchilla sobre la palma de nuestra mano podemos sacarla de la jaula y apoyarla contra nuestro pecho, siempre manteniendo una mano por debajo de ella para que sus patas no queden en el aire, ya que eso las incomoda enormemente. Es posible que las primeras veces que cogemos a nuestra chinchilla esta se muestre asustada e incomoda pero si la cogemos todos los días pronto se acostumbrará a ello y su actitud pasará a ser mansa y tranquila, podremos entonces sacarla de la jaula y mantenerla sobre la palma de nuestra mano sin miedo a que escape, ya que ella se encontrará tan a gusto con nosotros que no mostrará interés alguno por huir de nuestro lado.

A la hora de coger a nuestra chinchilla deberemos evitar en la medida de lo posible sujetarla por el rabo, en caso de ser totalmente necesario hacerlo la cogeremos SIEMPRE de la base de la cola, nunca mas allá, ya que podríamos rompérsela o fracturarla. Las chinchillas odian sentirse apresadas por la cola, ya que es como si un depredador las hubiera capturado, nunca debemos olvidar que las chinchillas son animales presa y eso es algo que va a condicionar en gran medida su comportamiento. Tampoco debemos nunca extender nuestra mano para cogerla desde arriba, esto se semeja enormemente a la forma en la que un ave rapaz la capturaría y no es algo que precisamente ayude a que nuestra chinchilla confíe en nosotros y se sienta tranquila.

Nuestra chinchilla será enormemente feliz si la soltamos un rato todos los días para que pueda correr e investigar para saciar su curiosidad y consumir energías. Pero en ocasiones puede resultar un problema volverla a coger para devolverla a su jaula, en pocas ocasiones las chinchillas colaboran gustosamente a la hora de ser devueltas a su jaula. Una buena pauta a seguir para no tener demasiados problemas a la hora de coger a nuestra chinchilla estando suelta es que el lugar donde la soltemos sea un sitio no demasiado grande y sin escondites de los cuales sea demasiado difícil sacarla, un pasillo, la cocina o el baño suelen ser una buena elección, siempre y cuando no exista el peligro de que nuestra chinchilla se meta de un salto en la raza del WC o en un cubo de fregar. Deberemos sentarnos con ella en el suelo y dejar que se suba por encima nuestro y nos "use" como juguete de obstáculos, la chinchilla disfrutará mucho saltando de nuestra pierna a nuestro hombro e incluso a nuestra cabeza y si además le ofrecemos de vez en cuando una golosina reforzaremos aún mas la conducta de acercarse a nosotros en pleno paseo. Cuando sea la hora de guardarla a su jaula tan solo deberemos de esperar a que ella se acerque a nosotros para coger alguna golosina que le ofrecemos o simplemente para jugar y cogerla suavemente para devolverla a su jaula.

Algunas chinchillas especialmente inteligentes pueden aprender trucos sencillos como responder al nombre, para ello deberemos emplear el método del refuerzo positivo, para lo cual si queremos, por ejemplo, enseñarle a nuestra chinchilla a que venga hasta nosotros cuando la llamamos deberemos de pronunciar su nombre y si ella casualmente se acerca a nosotros entonces la premiaremos con una golosina. Repetiremos esto hasta que nuestro animal responda al nombre viniendo instintivamente hasta nosotros. Este método podemos emplearlo para enseñarle pequeños trucos fáciles que se nos ocurran. Nunca deberemos de chillar y mucho menos pegar a nuestra chinchilla, el refuerzo negativo no funciona con ellas, solo conseguiremos que nos coja miedo y pierda la confianza que había podido depositar en nosotros.

Si tratamos a nuestra chinchilla con cariño y dulzura, la cogemos con frecuencia, respetamos sus momentos de sueño y le hablamos suavemente, reforzaremos nuestro vínculo con ella y podremos disfrutar de la compañía de una mascota muy amigable, capaz de reconocernos, de comunicarse con nosotros haciéndonos saber que es lo que quiere y entendiendo lo que deseamos de ella, que nos reportará enormes satisfacciones.

Evi la chinchilla

Esta es una chinchilla muy parecida a la mía que me encontré en youtube